El Ayuntamiento llevan meses ignorando las peticiones del Defensor del Pueblo Andaluz. Se niegan a darle información de las obras que hizo el restaurante Blankko en la Torre Vigía





El pasado viernes, 23 de Enero, la plataforma digital Revista El Observador se hizo eco de la notificación que recibieron los vecinos de Torremuelle del Defensor del Pueblo, donde informaba de que el Ayuntamiento de Benalmádena aún no le ha enviado la documentación que le solicitaron el día 5 de noviembre.

A continuación transcribimos la noticia publicada en dicho medio digital con el título

"Transparencia. La alcaldesa de Benalmádena, Paloma García (PP), y su Ayuntamiento llevan meses ignorando las peticiones del Defensor del Pueblo Andaluz. Se niegan a darle información de las obras que hizo el restaurante Blankko en Torremuelle"

La polémica entre el negocio y los vecinos se prolonga ya desde hace casi cuatro años. El Consistorio se pone de parte de la empresa, pasa de los residentes e ignora todos los requerimientos que le hacen desde la institución andaluza

23/01/15. Urbanismo. El Ayuntamiento de Benalmádena que gobierna Paloma García Gálvez (PP) sigue ignorando todas las solicitudes del Defensor del Pueblo Andaluz. El organismo quiere información sobre las obras que un restaurante privado ha ejecutado en el entorno de una torre vigía protegida. La entidad andaluza se lo explicó así a los residentes en Torremuelle, en un escrito fechado el pasado martes al que ha accedido EL OBSERVADOR / www.revistaelobservador.com. Este negocio, Blankko, sigue irritando a los vecinos. En verano organizan fiestas y conciertos que impiden que puedan descansar, y estos últimos años ejecutaron estas obras que vallaban el monumento que es un Bien de Interés Cultural (BIC).

La asociación de vecinos de Torremuelle daba su propio titular en las redes sociales: “el Ayuntamiento vuelve a pasar olímpicamente del Defensor del Pueblo”. Como ya informó esta revista el mes pasado, el Consistorio de Benamádena ya ignoró los requerimientos de este organismo, que comenzó a hacerlos efectivos ya en noviembre. Lo que quiere es más información sobre las intervenciones que el restaurante Blankko ha ejecutado en el entorno del monumento. A la inauguración del negocio acudieron varios concejales. La alcaldesa de Benalmádena, Paloma Gálvez, del PP, es abogada. Nació en Madrid, aunque llegó al pueblo cuando era una niña. Fue secretaria de la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Málaga y durante cinco meses, diputada nacional en el Congreso.

En un escrito que el Defensor del Pueblo Andaluz hace llegar a los vecinos se explica: “nuevamente nos ponemos en contacto con usted para comunicarle las gestiones realizadas en la tramitación de su expediente de queja arriba referenciado”. “A este respecto le indicamos que seguimos sin obtener respuesta del Ayuntamiento de Benalmádena a las cuestiones que en su momento le planteamos. Por este motivo, hemos dirigido un nuevo escrito a dicho organismo reiterándole por segunda vez el requerimiento que le hicimos. En cuanto obtengamos respuesta, la analizaremos y nos pondremos en contacto con usted”. La misiva la firma Carlos del Barco Galván, adjunto al Defensor del Pueblo. La asociación de vecinos de Torremuelle ya recibió una carta similar en diciembre. El colectivo denunció entonces que el Ayuntamiento “no da explicaciones a sus vecinos, pero ya ni siquiera a organismos serios como puede ser el Defensor del Pueblo”. “Los vecinos de Torremuelle hemos realizado más de 20 denuncias y solamente han contestado a dos, y una de ellas tardaron nueve meses en responder".



El conflicto de los residentes con el restaurante Blankko se remonta varios meses atrás e incluye una campaña de recogida de firmas en la que participaron más de un centenar de vecinos. Además de la ocupación de un monumento protegido, los vecinos dicen no poder más por los excesos de ruido del polémico restaurante. El responsable de Comunicación de la asociación, Antonio Lavado, explicó el mes pasado a EL OBSERVADOR que la situación sigue siendo la misma después de que las denuncias comenzasen a ser públicas, con conciertos los fines de semana hasta bien entrado octubre, e incluso lanzamientos de fuegos artificiales. En los dos vídeos siguientes pueden ver el sonido que provoca el negocio.

 

http://youtu.be/UAdHPWrpLa4


http://youtu.be/lRga-9vLRtk

La polémica nace cuando el restaurante comenzó unas obras para ampliar su recinto en el año 2011. Para ello taló unos cipreses y trasladó el muro que separaba el negocio de la característica Torre Vigía de la zona, catalogada como Bien de Interés Cultural (BIC). Las reformas se prolongaron a lo largo de ese año y en 2012 se personaron inspectores de Urbanismo tras recibir la queja de vecinos. Los inspectores del Ayuntamiento paralizaron las obras del restaurante cautelarmente, según explicaron los vecinos, por carecer de licencia. En marzo del 2012 el expediente para conceder esta licencia continuaba en trámite, pero la intervención se reanudó. De hecho, en agosto de 2013 se pintó de blanco una rotonda anexa al restaurante, siguiendo los colores corporativos del negocio, que pretenden emular el ambiente de las playas de Ibiza, y a finales de ese año los privados cerraron el acceso al monumento público con vallas, como se puede comprobar en el siguiente esquema.



La inauguración del local tuvo lugar en agosto de 2013, según indicaron las mismas fuentes vecinales a esta revista, y a ella acudieron concejales del propio Ayuntamiento de Benalmádena. Además del conflicto urbanístico, los problemas de ruido continúan soliviantando a los vecinos del enclave.

Todos estos hechos fueron puestos en conocimiento del Defensor del Pueblo Andaluz, que aceptó a trámite la queja con una diligencia extraordinaria, en cuestión de días. Sin embargo, la oficina del Defensor ahora también combate la lentitud de la corporación municipal, que ha zancadilleado durante meses la investigación y las quejas de los residentes. Así, son testigos de que la transparencia por parte del Consistorio es "prácticamente nula". "No nos sorprende que no haya respuesta porque llevamos desde 2011 denunciando lo que pasa aquí y nadie nos ha contestado a nada de nada. Nunca. Es su procedimiento habitual. Transparencia igual a cero", subrayan los vecinos.

El Defensor del Pueblo no cesa en su empeño. Requerirá de nuevo una respuesta a la corporación local sobre las licencias y expedientes sancionadores de las obras realizadas “de forma ilegal”, según la asociación vecinal, en la Torre Vigía de Torremuelle. La primera solicitud de esta información fue formulada el pasado 5 de noviembre.



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2 Comentarios

  1. A este individuo seguro que le están diciendo desde el Ayuntamiento: Se fuerte cuando estés en el truyo, que es donde se merece de estar. ¿Es verdad que ya a estado las 72 horas que marca la Ley?.

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  2. Además de este personajillo,deberían de enchiquerar,a los qué consienten esta burradas en un pueblo o región, donde empieza y termina la inlegalidad ¿ Porque no actúa la ley, o es que el letrero de la entrada refreja la realidad?.Torremulle Citi !!!!!!

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