¡Atónitos! Así nos quedamos los vecinos cuando vimos este dantesco "espectáculo" en Blankko el pasado viernes día 2 de octubre. Al principio pensamos que se trataba de una redada policial, pero…, ¡qué va! Al instante vimos como los agentes de la Policía Nacional bebían y comían tan tranquilos… con sus trajes de galas. Los vecinos extranjeros, sorprendidos, que saben perfectamente todo los hechos ocurridos relacionados con este restaurante, se llevaban las manos a la cabeza. No salían de su asombro, al igual que todos nosotros.
Es increíble. Un restaurante que la Asociación de Vecinos ha denunciado por no cumplir las normativas de accesibilidad, por exceso de ruido y música, por hacer obras ilegales por dentro y por fuera, por apropiarse y hacer obras ilegales en terreno público protegido, por haber tenido una terraza en peligro de derrumbe, por haber sido agredido un vecino en dicha zona y que ha perdido la visión de un ojo, etc., etc.,… y además su dueño ha sido condenado por tráfico de drogas… en lugar de cerrarles el negocio, lo que hace la policía es venir a celebrar una fiesta?? ¿No podían ir a celebrarlo a otro sitio con la cantidad de restaurantes que hay en toda la costa? Al menos, por respeto a los vecinos que llevamos años luchando y denunciado todas las irregularidades que ha cometido el propietario de este restaurante en esta zona protegida...
Algunos agentes venían con varias medallas colgadas. ¿Estás medallas que son condecoraciones? ¿Por luchar contra el tráfico de drogas…? ¿Por hacer cumplir las leyes y las normativas? ¿Por estar al tanto de todo lo que ocurre a su alrededor?
En fin, lo que hemos visto hoy los vecinos de Torremuelle es una situación esperpéntica. ¿Esta es la imagen de España que se van a llevar los extranjeros a sus países? Además de dañar a la Marca España… a los vecinos nos han dañado… EL ALMA. ¡¡VER PARA CREER!!
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